¿Sustentable según quién?
¿Cómo se certifican y cuáles son algunos de los festivales más sustentables del mundo? Existe al menos una compañía capaz de medir estos criterios, entregarles puntajes e incluso premiar eventos, venues y festivales. A grandes rasgos, así es como opera esa compañía y algunos de los festivales reconocidos por ellos y la industria en general.
Inventemos un festival ficticio. Llamemoslo Now Fest para el ejercicio y supongamos que queremos que sea reconocido como un evento sustentable, ¿quién podría entregarnos esa certificación? Siguiendo el ejemplo de algunos de los grandes -como Glastonbury, Primavera Sound, DGTL o We Love Green- probablemente tendríamos que recurrir a A Greener Future (AGF), compañía (sin fines de lucro) pionera en eventos verdes a nivel global y creadora de la certificación para festivales sustentables. Ellos podrían dar a nuestro festival ficticio entrenamiento, apoyo y guía en estrategias de huella de carbono y cero neto.
Cientos de festivales alrededor del mundo se han acogido al esquema de certificación de AGF desde 2007, el que provee auditación y verificación independientes, además de ayuda mejorando eficiencia de recursos y disminuyendo impacto ambiental.
Como cualquier evento o venue nuestro festival ficticio puede postular. La primera parte del proceso consiste en proponerse la tarea e involucrar a los equipos, colaboradores y marcas. Los asesores de AGF visitarían nuestro Now Fest. Nosotros deberíamos entregar toda la información y evidencia. Posteriormente recibiríamos feedback y nuestro puntaje. AGF nos entregaría nuestra certificación anual e, idealmente, año a año deberíamos ir mejorando en 12 áreas especificadas por AGF, que incluyen impacto en el ambiente y la comunidad local, energía, transporte, comida y bebida, uso de agua, desperdicios sólidos y reciclaje, analisis de CO2, entre otros.
Desde los datos arrojados por las auditorías, las visitas en terreno y el análisis de evidencias, AGF entrega cada año premios a los eventos más sustentables, incluyendo 50 festivales, venues y organizaciones de 14 países. En 2023 el ganador fue el festival family-friendly Green Gathering, un evento que ocurre en las afueras de Chepstow, a 18 millas de Bristol y 125 de Londres, y que reúne más de 100 actuaciones de músicos que van desde sonidos psicodélicos, a folk, punk radical y cantautores con contenido político. Green Gathering recibió el premio entre otras razones por usar energía 100% renovable, comida vegetariana, impartir talleres de reciclaje y permacultura, promocionar de una manera no agresiva y por promover un estilo de vida de bajo impacto.
La edición holandesa de DGTL ha recibido dos International AGF awards. Uno por transporte verde y otro por innovación en reutilizables o estrategia circular. En Amsterdam el festival de música electrónica ocurre cada año en abril en un astillero en desuso y entre las medidas que adopta para reducir su impacto se pueden destacar un patio de comidas a base de plantas y libre de desperdicios, el reciclaje de agua, la prohibición del diésel y la inversión en combustibles sustentables cuando necesitan llevar artistas en aviones. Muchos de estos estándares no son replicables en otras ciudades en las que ocurre DGTL, pero el festival se encarga de que todas cumplan el manual de manera estricta y en todas las ediciones satélites se persigue el ahorro y eficiencia energética y en ninguna se consume carne, por ejemplo.
Con carteles atractivos que incluyen artistas como Gorillaz, Massive Attack y Disclosure, We Love Green se ha vuelto uno de los festivales más populares de Francia. El público ha valorado además la aproximación vanguardista a la precaución ambiental que muestra este evento masivo, introduciendo innovaciones en baños ecológicos, limitando el uso de papel, convirtiendo en abono los restos de alimentos y promoviendo la conciencia ecológica con talleres y conversatorios durante todo el festival. En el parque Bois de Vincennes de París ofrece además comida orgánica, fruta e instalaciones artísticas que promueven sus valores.
Desde que comenzó en 1986, Burning Man se cimienta en 10 principios; uno de los más importantes es “No dejar huella”. En años más recientes, y a través de una organización sin fines de lucro, han logrado alimentar el festival con energía solar con paneles que donaron al pueblo cercano y aportan fondos para proyectos comunitarios. Mientras Burning Man se propone no dejar huella, Terraforma se trata de restaurar el lugar que ocupa: los pintorescos terrenos de Villa Arconati, en las afueras de Milán. Muchos asistentes a este festival experimental y sostenible se apuntan incluso para trabajar en la reconstrucción de los históricos jardines de la villa.
Se dice que su programa de recolección de desechos se convertirá en el estándar para la industria, incluyendo una investigación y un informe después de cada edición del festival. Con la ayuda de jóvenes arquitectos locales la villa ha sido prácticamente reconstruida con materiales sostenibles, y el laberinto en el corazón de esta ya tiene más de 500 árboles
October 6, 2023