El ser humano es un animal de costumbres. Ya lo dice la maravillosa charla Ted de Dan Gilbert, sobre cómo una persona en silla de ruedas y una persona que se gana la lotería, luego de diez años vuelven a estar igual de “felices”. El tiempo todo lo cura. O, en realidad, el tiempo todo lo acostumbra. Y luego de año y medio trabajando semi encerrados, podrías estar lo más acostumbrado a que tu nueva oficina es tu comedor.

Aunque tu espalda te lleve la contraria de tanto en tanto.

Por eso, hoy  quiero compartirles algunas herramientas verdaderamente notables con las que nos hemos ido topando con nuestros equipos, en estos meses de encierro. Obligado o no, costumbre o no, algo de teletrabajo quedará para sirmpre en nuestro día a día. Y más vale estar preparados:

Around. Zooms minimalistas.

La primera, es una tremenda novedad. Se llama Around; y es la evolución de Meet, Zoom o Teams. Sus creadores, de industrias creativas, pregonan el “matar esa fatiga que mata la creatividad”. Around es una interfaz minima. Poco intrusiva. Que en pocos días ha ganado varios adeptos entre mis conocidos. Bien vale la pena probarla:
Around

Loom. Esta repetición de reunión, era un mail.

Te ha pasado que tienes que presentar algo muy importante y muy largo… y que luego te piden presentar nuevamente al jefe y al jefe y al jefe del jefe? Al final, esa presentación de una hora se vuelve tres, cuatro, cinco. Mátenme. Uf.

Pero no. Esto se acabó gracias a Loom. Una increíble aplicación que permite grabarte en una pequeña burbuja de video por sobre tu presentación, para luego poder compartir ese video tal como si estuvieras presentando en vivo.

La versión gratuita te permite grabar 5 minutos, con colaboradores ilimitados.

La pagada, desde USD $8, te da espacio y tiempos ilimitados para subir y subir presentaciones en tu usuario.

Loom

 Calendly. Ponte de acuerdo de una vez.

Acompáñenme a ver esta triste historia, que seguro también es tu historia: ponerse de acuerdo, por WhatsApp, con muchas personas a la vez, para tener una fuckin reunión de una vez. Un cacho eterno. Pero ahora que existe Calendly, todo lo que tienes que hacer es conectar tu sistema de calendarios con la aplicación, y compartir tu usuario con quienes quieres coordinar reuniones. Ellos podrán ver los espacios de tiempo que dispones (por supuesto que sin ver la información privada); y agendar ellos mismos la reunión. Tú puedes establecer la duración de dichas sesiones, qué momentos del día o la semana están fuera de la discusión, e incluso entender los cambios de horario por zona, para que no vuelvas a dejar a Argentina esperando por 1 hora gracias al cambio de horario.

Calendly